Las vivienda son parte del proyecto Mi Casa Resistente, en el colaboran varias organizaciones de profesionales.
Primera HORA
Por Osman Pérez Méndez
24 de febrero de 2021 • 2:02pm
Dos familias de bajos recursos recibieron hoy las llaves de su nuevo hogar en las cercanías del Caño Martín Peña, gracias al trabajo de personas comprometidas con el proyecto comunitario “Mi Casa Resistente”.
Se trata de modernas estructuras que se adaptan a las circunstancias del terreno disponible, y que además utilizan varios sistemas de redundancia para el uso de agua y electricidad.
Don Manuel Tamales y doña Sixta Gladys Peña Martínez recibieron las llaves de sus respectivas casas, una en la Calle 10 de Barrio Obrero, y la otra en la Calle Popular de Las Monjas.
“Gracias a esta magnífica comunidad, hoy voy a estar bajo un techo seguro. Gracias de verdad a todos”, expresó, visiblemente emocionado don Manuel.
En tanto, doña Gladys recordó el inicio de los proyectos comunitarios en 2004, y aseguró que “nunca pensé que a mí me iba a tocar este proyecto y estos trabajos que ustedes hacían para las comunidades”.
“Les doy mil gracias. Y les doy las gracias porque en realidad llegó en el momento que más necesitaba un hogar, porque el huracán María me lo destruyó. Y gracias a ustedes yo tengo esta vivienda, sana, segura y sanitaria”, afirmó doña Gladys, igualmente emocionada.
El proyecto de Mi Casa Resistente es una colaboración entre la Fundación del Colegio de Ingenieros y Agrimensores, el Colegio de Arquitectos y Arquitectos Paisajistas, el G-8 (Grupo de las Ocho Comunidades Aledañas al Caño Martín Peña), el Proyecto Enlace del Caño Martín Peña y el Fideicomiso de la Tierra del Caño Martín Peña.
El proyecto incluyó un concurso de diseño de vivienda, que ganó el arquitecto Fernando Abruña, quien aseguró que participar del proyecto “fue realmente no solo un honor, sino también un trabajo enorme. Pero el resultado final está aquí”.
“Quiero resaltar que la casa se diseñó con los conceptos de sostenibilidad y resiliencia. Entre ellos, por ejemplo, tenemos sistemas redundantes en el agua. Para que esta familia se quede sin agua tienen que pasar tres María por aquí. Estamos conectados al sistema de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados. Si ese fallara, tenemos una cisterna alimentada por la Autoridad también, de agua potable. Y si ese fallara, tenemos también una cisterna de agua de lluvia. Tiene que fallar tres veces. Y en el peor de los escenarios, que se quedaran absolutamente sin agua, están por llegar unos inodoros de composta que no utilizan agua y convierten el excremento en abono. Tiene todos esos componentes que normalmente no se ven en casas de este tamaño y en comunidades como esta”, comentó Abruña.
De igual forma, la vivienda está preparada para que en el futuro cuente con un sistema completo de paneles fotovoltaicos con baterías, así como una planta de emergencia solar que puede operar la nevera las 24/7, y le queda además algo de energía para operar luces y abanicos.
“Creo que es un gran evento para celebrar, porque demuestra que la sostenibilidad y la resiliencia no son solamente para la gente que tiene dinero. Es algo que se puede hacer para todo el mundo”, agregó el arquitecto.
Lucy M. Cruz, presidenta del G-8, agradeció a las personas que participaron en el proyecto por “el empeño y el trabajo” realizado. Recordó que durante el huracán María, en las comunidades aledañas al Caño, 75 casas quedaron completamente destruidas y más de 1,200 techos desaparecieron total o parcialmente.
“No fue fácil elegir entre toda la gente de nuestras comunidades que tienen esas necesidades, así que tuvimos que utilizar criterios, de personas mayores de edad que se encuentran solas, que su techo no aguantaba un techo de madera, que su techo no aguantaba ni siquiera un toldo, porque era un peligro para esas personas. Así que las selecciones fueron muy certeras”, afirmó Cruz.
Según se anunció, una tercera vivienda como estas ya se va a comenzar a construir, y el equipo detrás del proyecto aseguró que están en condiciones de hacer otras más, si aparece el financiamiento. Hicieron un llamado a las agencias del gobierno para, ahora que hay una gran cantidad de fondos federales disponibles para la reconstrucción, se considerara la posibilidad de incluir al proyecto como uno de los posibles receptores de fondos para poder beneficiar a más familias con estas modernas viviendas resilientes.
Fuente: Primera Hora